El dilema de las Redes Sociales: el lado más obscuro de la era de Internet
Sociedades polarizadas al borde de la Guerra Civil gracias a los centenares de imputs informativos que radicalizan nuestras propias opiniones y confirman nuestros prejuicios, suicidios infantiles por no cumplir los cánones de belleza de las influencers niquelados a base de filtros; depresiones, bullynng, desinformación, adicciones....La propia Mar España ya dio la voz de alerta como Informamos en Escudo Digital al señalar que hay padres que pagan hastga 300 euros por likes para sus hijos.
Todo eso y mucho más refleja uno de los mejores documentales que se han hecho nunca sobre las redes sociales. Lleva por título El Dilema de las Redes sociales, lo emite Netflix y está siendo trending topic entre los estudiosos del marketing digital. Ex directivos de Google, Facebook, Instagram, Pinterest y Twitter abordan desde un enfoque ético todo lo que se está haciendo mal desde el punto de vista moral en las redes, e incluso en los servicios de mensajería.
Si no estás pagando por el producto, entonces eres el producto
El dilema de las redes sociales es tan apasionante como un Thriller. Dura algo más de una hora y media y en ese tiempo es imposible apartar la mirada de la pantallla, como le ocurre a millones de personas con sus móviles.
Nunca hasta ahora nadie había reflejado de forma tan cruda el impacto de las redes sociales en nuestras vidas, las fake news, la falta de seguridad y control sobre nuestros datos, el robo de nuestra propia identidad para ponerla al servicio de la monetarización. Y todo mediante técnicas de psicología social basadas en herramientas con un diseño adictivo que crean una continua necesidad de recompensas.
Netflix define a esta producción como un “híbrido entre documental y drama que ahonda en el negocio de las redes sociales, el poder que ejercen y la adicción que generan en nosotros: somos su carnaza perfecta”.
Se la denomina híbrido porque mezcla testimonios como el de Tristan Harris, ex diseñador de Google y fundador del Centro para una tecnología humana con la vida de una familia ficticia, interpretada por Skyler Gisondo, Kara Hayward y Vincent Kartheiser en la que muchos nos veremos reconocidos.
El Dilema de la Redes Sociales analiza los algoritmos que radicalizan a los usuarios en sus propias opiniones
Los algoritmos, según sostienen los expertos, buscan potenciar los intereses del usuario que, según se postula en el film, termina sin ver otras opiniones que no confirmen las que ya tenía. Su microcosmos se limita a recibir vídeos y noticias que confirman su forma de pensar. Por eso a veces da la impresión que vivimos en mundos diferentes a los de amigos que no comparten nuestra ideología.
El usuario, un ser humano gregario por naturaleza desde hace miles de años, tiene una necesidad imperiosa de recibir una recompensa, que en nuestros tiempo llega en forma de comentario, like o retuit. Se genera un neurotransmisor llamado dopamina que nos convierte en adictos a las redes. Y se hace mediante avisos, alarmas y notificaciones derivadas del conocimiento de nuestras costumbres que tienen gracias a los datos que les cedemos gratis. Entre los ponentes o “arrepentidos” hay figuras tan importantes como Justin Rosenteeim, inventor del botón de me gusta de Facebook o Tim Kendall,
Tim Kendall, ex-director de monetización de Facebook y ex presidente de Pinterest, es una de las personas que mayor impacto causa con sus opiniones sobre la manipulación de la que somos víctimas. Una de las frases más duras que se pronuncian es esta: “Si no estás pagando por el producto, entonces eres el producto”. La frase alude al valor que tienen los datos de nuestras preferencias para las marcas o anunciantes. Y por supuesto, el exceso de datos que tienen sobre nosotros, que invaden claramente nuestra privacidad.
Teoría conspiranoicas y fake News
El documental dedica muchos minutos a la noticias falsas o fake news, desde la teoría de que la tierra es plana o que las antenas de 5G son las culpables de la propagación del Covid-19. Son más atractivas que la información real por ello se viralizan seis veces más deprisa, la verdad es más aburrida, y nadie duda en compartir una teoría conspiratoria, resulta mucho más entretenido, aunque no seamos conscientes del daño que podemos causar intoxicando. El problema que se plantea, y que no resuelve el documental es quién decide lo que es una fake news sin caer en la censura. El Dilema de las Redes Sociales debería ser de obligada proyección en las escuelas, afirman expertos en tecnología y ciberseguridad; y, sin embargo, solo puede verse en una cadena de pago.