El proyecto para transportar sangre para una transfusión en Arizona se produjo como parte de una investigación llevada a cabo por médicos de la Johns Hopkins University.

 

En Estados Unidos se ha utilizado un dron para realizar un viaje de más de 250 kilómetros a través del desierto de Arizona transportando muestras de sangre hasta un laboratorio. Han dicho los responsables de este proyecto que este fue un medio de transporte más rápido que muchos otros.

 

A pesar de la originalidad de esta idea, el hecho de transportar sangre usando dispositivos no tripulados de control remoto no es nuevo y en el pasado el proyecto Zipline, en California, transporta sangre para transfusiones con un dron en Ruanda y lo harán muy pronto en Tanzania. En África, en ocasiones, las distancias por tierra pueden ser muy largas, por ello este proyecto es muy oportuno en los mencionados países. Algo similar pasa en países de América Latina, por lo que este uso de drones podría llegar en un corto plazo de tiempo.

El proyecto en Arizona se produjo como parte de una investigación llevada a cabo por médicos de la Johns Hopkins University. Según las informaciones, esta prueba superó todos los récords de traslado de muestras biológicas con vehículos no tripulados.

 

Los autores del estudio han publicado en la revista científica 'American Journal of Clinical Pathology' que consideran que este experimento augura un futuro esperanzador en el ámbito de la medicina rural, donde el simple hecho de ir al médico o acudir al hospital para hacer una transfusión conlleva un tiempo muy alto desplazamiento.

 

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