#Animojis, los emoticonos del #iPhone X que imitan las expresiones faciales de los usuarios
Los «emojis» o emoticonos se han convertido en un idioma gráfico universal para añadir énfasis a las conversiones a través de las aplicaciones de mensajería y las redes sociales. Representan el tono de las palabras para que no se malinterpreten, ya que el tono de una conversación es relativo para quien lo lee cuando no se puede percibir el tono y las expresiones de las personas. La simbología aporta el toque alegre, irónico, irascible o amoroso que a veces necesita el lenguaje en una pantalla.
Durante la presentación de los nuevos productos de Apple, el momento álgido de la particular fiesta de la compañía fueron los minutos del debut del iPhone X. El dispositivo de aniversario de la compañía llegó como homenaje por los diez años del primer móvil inteligente sin teclado y usabilidad plenamente táctil. Sin embargo, la atención se centró en la tecnología Face ID, que no solo sirve para autentificar el usuario a través del reconocimiento facial, sino también para revolucionar la comunicación gráfica.
Así entraron en escena los «Animojis», con movimiento, gráficos 3D y la capacidad de imitar las expresiones fáciles de una persona. ¿Os imagináis mandar un unicornio que le diga a un familiar que vaya a comprar el pan con los gestos del usuario? Los «animojis» no son simples imágenes en movimiento como los paquetes de «stickers» de Facebook o de Telegram, son el primer paso para que otras empresas empiecen a imitar la próxima generación de la comunicación gráfica.
No pasará mucho tiempo para que se vean en otras aplicaciones, aunque en principio permanezca en la propia plataforma iMessage. Sin embargo, tal vez la compañía no sea la creadora de esta idea y solo la máquina de recopilación de tendencias para desarollar algo mejorado. Sin ir más lejos, en el tercer capítulo de la segunda temporada de la serie Black Mirror los telespectadores pudieron disfrutar del poder de la comunicación gráfica, a través de un personaje de animación en directo que se movía grácias a unos joystick dirigidos por una persona y que imitaba las expresiones faciales y reproducía la voz. Un dato: el personaje se presentaba a las elecciones y ganaba.
La expresión «una imagen dice más que mil palabras» viene al pelo cuando se trata de describir la manera en que se comunican las personas a través de la tecnología. El color es el hilo conductor de la expresión humana. Para echar la vista atrás, del tiempo que llevan acompañando los emoticonos hay que mirar a la década de los noventa, cuando un miembro de la plataforma de internet móvil de DoCoMo, Shigetaka Kurita, incorporó el símbolo del corazón en los terminales Pocket Bel.
Más tarde se crearon un grupo de símbolos que implicaron los primeros despuntes de los «emojis» actuales. Por otro lado, hay otro ejemplo de tendencia que ha podido resultar ejemplificadora en la fábrica de recopilación de ideas de Apple para generar un producto único: «Talking Tom». Hace unos años, se desarrolló un programa en el que un gatito reproducía la voz de los usuarios con una voz aguda, el inventó causó furor en las redes, a pesar de carecer de expresiones de la persona gracias a la inteligencia artificial. Sin embargo, sí fue un paso para lo que podía ser la comunicación en un futuro a través de un avatar.